sábado, 11 de febrero de 2012

Peine del Viento en San Sebastián (Gipuzkoa).

Peine del Viento XV

Esta obra de -Eduardo Chillida Juantegui (San Sebastián, 10 de enero de 1924 – San Sebastián, 19 de agosto de 2002)– Peine del Viento XV, erróneamente llamado Peine de los Vientos – es una de las obras más conocidas del escultor vasco. Situada en un extremo de la bahía de La Concha en San Sebastián, en el País Vasco en España, el grupo de tres esculturas insertadas en las rocas, de frente al mar Cantábrico, remata el paseo costero que bordea la bahía, formando un destino para el recorrido, además de un espacio público excepcional. La plaza desde donde se miran las tres esculturas no es obra de Chillida,  sino de su amigo arquitecto Luis Peña Ganchegui. Trabajaron mano a mano para construir simultáneamente la obra escultórica y el espacio desde donde mirarla.
Cuando se colocaron en septiembre de 1977 no se hizo ninguna inauguración, pero en el 2007 la ciudad quiso rendirle un homenaje a los 30 años que cumplían, los hijos y la mujer de Eduardo Chillida acudieron al acto que la ciudad le dedico. Este homenaje también le rindió tributo a mas arquitectos e ingenieros que han participado en parte de la obra de arte, entre ellos el arquitecto Luis Peña Ganchegui, que fue el que se encargó de diseñar la plaza que da acceso al Peine del Viento; el ingeniero José Mari Elósegui, que dirigió la instalación de las piezas; y el industrial Patricio Echeverría, en cuya empresa se fundieron las esculturas, de nueve toneladas cada una.











4 comentarios:

  1. Extraordinarias imagenes. Ese sitio es de los pocos que me gustan en Donosti con algo de Chillida.

    Es una gozada sentarse cerca de uno de los huecos de esa plataforma de Peña Ganchegui y escuchar el ruído del mar y del viento.

    Con la distancia se pierde la grandiosidad de la obra.
    Siento decirte, Don Jaime, que salvo ese lugar las restantes obras de Chillida y Oteiza me resultan exactamente iguales.

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  2. De Oteiza Tellagorri, creo que tambien podemos salvar el friso de los apóstoles de Arantzazu y alguna mas que quizás no conocemos; los que me parecen infumables, son Basterrechea E Ibarrola.
    Concuerdo contigo en que el Peine del Viento, es de lo mejor de Chillida, pero mucha culpa la tiene Peña Ganchegi, por que resulta tan especial el continente, como el contenido.
    Y el ruido de la mar, para un antigüo marino,llega al alma y trae miles de recuerdos; por eso muchas veces me voy temprano, para disfrutar del lugar en soledad.
    Salud

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  3. Jaime, cada día te superas... Y encima nos cuentas algo de historia... Sigue así

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  4. Se hace lo que se puede, mucho no se, pero buscando algo aparece.
    Con esos ánimos, seguiré.

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