Teatro Victoria Eugenia de San Sebastián
La Sociedad Anónima de Fomento de
San Sebastián se creó en 1902 y su primer objetivo fue la construcción de un
gran hotel y de este teatro. Fue proyectado en el año 1909 por el
arquitecto francés Charles Fréderic Mewés (Estrasburgo 1858-1928) y el
donostiarra Francisco de Urcola Lazcanotegui.
Se trata de
un edificio monumental exento, construido en la zona ganada al río, y, junto
con el Hotel María Cristina, constituye un conjunto, separado por los jardines
de Oquendo. El Teatro Victoria Eugenia es el más importante de San Sebastián,
sin duda alguna, tanto por el espacio que ocupa en la ciudad como por el
edificio en sí, de gran calidad tanto en el interior como en el exterior. El
edificio, que mantiene su composición original, se ha renovado completamente en los últimos años.
Es un edificio monumental, de planta rectangular. Para construir los cimientos,
los forjados y la cubierta se utilizó hormigón
armado, tal como se estilaba en la época, especialmente en teatros y edificios
públicos, debido a que es un buen material contra incendios y porque, además de
ser de larga duración, su mantenimiento es sencillo. Para construir el edificio
se utilizó piedra arenisca de las canteras de Ulia e Igueldo, para los grupos
escultóricos piedra de Pitillas
(Navarra). En el solado de corredores y vestíbulos se colocaron mosaicos Nolla
traídas de Meliana (Valencia), salvo en el vestíbulo principal, en el que se
utilizó mármol mosaico, y en las habitaciones de la segunda planta, en las que
se utilizó pino y roble.
El edificio abarca un área de 2460
m2. La fachada principal del teatro da al río. En todas las plantas destaca
esta característica: presentan tres huecos con arcos carpaneles, que tienen a los lados columnas
exentas, muy esbeltas, colocadas a pares sobre pedestales. Las columnas
presentan en su parte inferior decoración de surcos e imágenes geométricas.
En la planta principal destacan
las enjutas de los tres grandes arcos de medio punto. Tal como
hemos dicho, esos tres arcos dan a tres balcones salientes con balaustres de piedra, sobre los que se apoyan los
pares de columnas descritas
anteriormente. Como elementos decorativos, se utilizaron imágenes florales y
los típicos medallones, con bustos del plateresco español de Xavier María de Munibe e Idiáquez Conde
de Peñaflorida (1723-1785), Juan Crisóstomo Jacobo Antonio de Arriaga
y Balzola (1806-1826), Miguel Hilarión Eslava (1807-1878), Sebastián
Julián Gayarre Garjón (1844-189) Joaquín
Romualdo Gaztambide y Garbayo (1822-1870) y José Juan Santesteban Iraola (1809-1884).
En la planta superior, en el
centro, podemos ver el escudo de armas
de la ciudad, y, en lugar de las columnas, hay unos
grupos escultóricos, debidos al profesor de la Escuela de Artes y Oficios don
José Iñíguez, la tragedia,
la danza, la música y la comedia. El conjunto se cierra mediante un
magnífico frontón triangular, decorado como el resto; en
los vértices, presenta unos pequeños pináculos. Detrás de las terrazas que hay a los
lados del cuerpo principal, destacan dos torres, que tienen dos grandes bustos
en la parte delantera (Wilhelm Richard Wagner, 1813-1883) y (Ludwig van Beethoven, 1770-1827) y que
también presentan pináculos en la parte superior de los extremos.
Las fachadas laterales, las más
largas, son muy similares entre sí, y en ambas destacan también las columnas
adosadas al cuerpo central, que presentan fustes decorados con surcos y que llegan hasta
la planta principal y la inmediatamente superior a ésta, entre grandes
balcones.
Comenzaron las obras de excavación
el 15 de abril de 1910 y el teatro se inauguró el 20 de julio de 1912. Actuó la
compañía de María Guerrero y Fernando Mendoza, con la obra “En Flandes se ha puesto el sol”, de Eduardo Marquina Angulo (1879-1946).
Feliz centenario.
La Tragedia
La Danza
La Musica
La Comedia
Extraordinario edificio. Para mí es el que más embellece a la ciudad en el sentido de calidad y buen gusto. Recuerda mucho a los de la Plaza de la Opera de Paris.
ResponderEliminarCreo, sin más fundamento, que URCOLA y demás emprendedores que crearon aquel San Sebastián de principios del XX, copiaron mucho la estructura básica de Paris, especialmente en los tipos de puentes que construyeron y de estos dos edificios contiguos como el que citamos y el Hotel.
Por supuesto que es un edificio extraordinario, de los mas bellos de la ciudad y tiene unos pocos y sin duda ninguna todo el ensanche es afrancesado, como no podía ser de otra manera.
ResponderEliminarLos puentes especialmente el de María Cristina, son tambien imitación de los de París.
La importancia que para el desarrollo de San Sebastián tuvo la Sociedad de Fomento, fue decisiva, ya que a ella se deben todos los edificios importantes.
Excelente trabajo Jaime... y se nota tu curso recién finalizado
ResponderEliminarEspero que el tiempo dedicado al curso, no haya sido en vano; en este caso solo era mirar con cariño.
ResponderEliminarEl monumento está la vista de todos, el percibir los detalles en manos de unos pocos, la próxima vez lo veré con otros ojos
ResponderEliminarAl no poder escalar altas cumbres, me conformo con los detalles que me son accesibles.
ResponderEliminarHace tiempo que quería fotografiar esas esculturas y medallones, desde siempre me llamaron la atención.
Como dentro de unos días cumple 100 años aproveché la ocasión.
Para ampliar información sobre el mosaico nolla pueden visitar: www.mosaiconolla.com
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